La carta está sobre la mesa...

La carta está sobre la mesa. Estoy deseando abrirla, pero hay algo que me lo impide. Mi madre la sacó esta mañana del buzón y me dijo con una agobiante mirada, como si supiera su contenido: "Hay una carta para ti", y la dejó aquí, delante de mí.
Cuando me decido por fin a abrirla me llama mi hermana, solicitando ayuda urgente(lo que luego fue ayudarla a abrir un botecito de pintura, para indignación mía). Llegó la hora de poner la mesa y comer, lo que pospuso la apertura de la misteriosa carta. Como si de una extraña conspiración se tratara, uno tras otro se fueron sucediendo los impedimentos para abrirla, lo que iba aumentando mi curiosidad, que se fue transformando en una angustiosa ansiedad. Por fin, ha llegado el momento de poder abrilrla. Ha caído la noche. En ella pone: "Morirás a media noche". Se oye a lo lejos el sórdido sonido de doce campanadas...